martes, 23 de octubre de 2012

Undécima entrada: Un sueño de locos.


Acabo de levantarme y desayunar, son exactamente las 11 de la mañana de un martes de octubre del 2013.  Aunque siempre deseo alejarme de la imagen de un Nini, hoy me siento pintiparado a esa tribu urbana de jóvenes que ni estudian ni trabajan, es inaceptable que me acueste a las 12 de la noche y amanezca ahora… lo sé es muy criticable.

Estaba en la cama tapado hasta los ojos, pensando, cavilando sobre mi actualidad, diciendo: “rayos y retruécanos, maldita crisis, maldito yo, maldita suerte la mía”. Y por mucho que le decía a mi cuerpo: “venga bonico mío vamos a levantarnos”. En el fondo pensaba y para qué… Para qué levantarme si el día va a ser igual que el de ayer, si lo único que voy hacer durante las 24 horas (unas cuantas menos en mi caso por ser un perezoso) de hoy es pelear contra mi mismo para lograr estudiar tres, cuatro, cinco o seis horas. Si voy a estar sufriendo con los “demoniacos” psicotécnicos hasta que mi cabeza explote como un globo al que pinchas con una aguja… Para qué si sólo han salido 153 plazas…  Para qué si este es un sueño de locos…

Un sueño de locos… es que no hay otra explicación a nuestra cuita queridos futuros compañeros,  nadie en su sano juicio seguiría en esta labor con las peculiares condiciones a las que la crisis esta sometiendo el oficio “opositoril”, nadie se presentaría tres, cuatro o cinco veces a una oposición que sólo van a aprobar 153 personas de miles presentadas, nadie malgastaría su tiempo en descubrir que vista de la figura “tocamelasnarices” se corresponde con la propuesta por el ejercicio psicotécnico 156, ni tampoco se aprendería cosas tan útiles para la vida moderna como la definición de Constitución propuesta por el austriaco Hans Kelsen…

Pero… conforme voy escribiendo estas palabras me doy cuenta de que yo quiero ese sueño de locos, que yo quiero vestir el uniforme del Cuerpo Nacional de Policía, que quiero poseer la dorada placa que representa a los agentes del cuerpo, que quiero pisar una comisaria para otros motivos que no sean renovar el DNI o el pasaporte (tampoco ir detenido o porque me han robado el coche). Quiero servir a mi país de una manera honrada, quiero ayudar al vecino, a la mujer maltratada, al niño perdido o a la abuelita desvalida que le han sustraído el bolso. No pierdo de vista que este camino del policía al que me enfrento tiene muchas más desventajas que ventajas y que habrá días en los que solo querré correr y esconderme a derramar miles de lagrimas porque mi alma no aguanta tanta mierda como contiene esta sociedad en la que vivimos, pero sé que lo bueno será tan grande que dejará en un segundo plano lo malo, y que la sola sonrisa de una persona a la que he conseguido ayudar bastará para hacerme seguir adelante y sentirme orgulloso de lo que seré, agente del Cuerpo Nacional de Policía.     

Tal vez me consideréis un idealista, pero si no fuera idealista hace tiempo que habría tirado la toalla, en cuanto concluya esta entrada voy a seguir soñando con lo que seré y librando día a día la batalla contra el desanimo, así que aunque sean casi las 12 de la mañana voy a ello, porque aún me queda medio día para hacer de hoy un día de mucho.

Un saludo

Firmado:

El soñador loco J

Posdata: Quería añadir a mi entrada un texto del señor moderador Copy… merece mucho la pena leerlo y en cierta manera complementa lo que yo he escrito.

Ya no enciendo la televisión porque me deprimen las noticias, no escucho la radio porque me distrae del estudio, apenas escucho música al correr o hacer dominadas, puedo ver a mis amigos con suerte muy de vez en cuando y estoy agradecido de la comprensión de mi novia, sobretodo por las pocas perspectivas de futuro que tenemos, seguimos trabajando los que aún podemos para simplemente subsistir, comprarte unas zapatillas nuevas, pagar un nuevo temario o unas cuantas libretas será lo que en el mejor de los casos necesitaremos, médicos, operaciones o tu propia manutención en los peores.

Somos tantos y cada uno con su propia situación, su propia historia, sus propios sueños. Pero algo nos diferencia de los demás, algo hace que nos sigamos poniendo delante del libro o saliendo a correr, algo impide que intentemos perder las tardes en un sofá o tomando una cerveza, algo nos ocupa el tiempo y nos hace valorar cada segundo, algo nos impulsa a levantarnos cada mañana a decir NO¡tengo que seguir! y es que a diferencia de muchos otros todavía NO nos hemos rendido, ni lo haremos. No nos importa caer una, dos, tres o las veces que haga falta, porque aunque tengamos la peor de las situaciones, el peor de los momentos, la menor de las oportunidades, no hemos dejado de creer en nosotros.

Tal vez tengamos idealizado nuestro destino o es que tal vez sólo buscamos pertenecer a algo grande, hacer algo grande, ser diferentes, que nos admiren por nuestro esfuerzo, por nuestro sacrificio, no lo sé. Nuestras humildes aspiraciones residen en un jersey, un pantalón, un cinturón, unos libros, unas ganas de trabajar, un nombre.

Nos reunimos en foros, podemos pasarnos horas y horas hablando de lo mismo al conocer un compañero de vocación, quedamos entre nosotros y tratamos lo mismo, para el resto del mundo somos monotemáticos. Acaso ¿cuántos ingenieros siguen nuestros pasos?, ¿cuántos arquitectos hacen lo que hacemos? pero aún así no podemos evitarlo, ¿sómos especiales o sólo diferentes? las ganas de aprender, de entender, de poder empezar, aunque çunicamente sea el primer pasito, el sentirnos cada día un poco más cerca nos obliga a ser así.

Es difícil seguir el ritmo, son muchas horas, muchas dificultades, muy difícil cuando además tenemos que compaginar otras responsabilidades, pero no os hundáis ante la adversidad, no dejéis que una simple prueba, un mero trámite os separe de vuestro destino, del futuro que piedra a piedra estamos construyendo.

Seguir así, porque cuando menos lo esperemos, estaremos frente a una puerta abierta, una puerta que podremos cruzar.

lunes, 1 de octubre de 2012

Décima entrada: No sé que título poner.


Cuando el frío comienza a desbancar al calor, creo que el ser humano se siente algo más triste tal vez por eso yo haya perdido algo de vigor en mi camino al CNP. El señor BOE sigue tan mudo como siempre, hablando lo justo y siempre para decir sandeces y cosas que me importan un bledo, a mí y seguramente a muchos de vosotros.

La cuita del opositor es tan voluble como la suerte, unos días se torna en agradable otras se vuelve macarra y te da golpes hasta en el DNI dejándote sin ganas de estudiar ni una mísera línea más.  Yo llevo días con un cortocircuito de órdago y me esta costando en exceso sacar los temas adelante, pero bueno esta historia ya la he leído y sé como acaba, tal vez en unas horas se me pase el shock y vuelva a estudiar sin que exista un mañana.

En mis cinco años (con este) de opositor nunca había vivido un proceso de selección tan raro y que se demore tanto como lo esta haciendo el actual, y lo cierto es que no me negaréis que es bastante fácil hundirse como un castillo de naipes al que prácticamente ni has mirado y ya se ha derrumbado del todo. Es cansino levantarse día tras día, mirar el BOE y ver tanta tontería de puesto de libre designación, pero en fin, como diría aquel: “son gajes del oficio” y como tales, hay que asumirlos sin más.

La semana pasada vivimos un nuevo episodio de la serie titulada: “Qué malísimos son los polis y que deshumanizados están”. Habría que ver a muchos de los meapilas, mequetrefes y zascandiles que se hacen llamar periodistas, en una manifestación de miles de personas gritando y con actitud agresiva (refiriéndome casi en exclusiva a los señoritos de la capucha y la cara tapada por supuesto), conteniendo a la multitud sin usar ni un casco, ni protecciones, ni escudos, ni defensas personales. Sólo con su portentosa voz de soprano y palabras lindas como: “Por favor señoritos, váyanse a sus respectivas casas, que aquí la fiesta se ha acabado”. Repito: “El permiso que les ha dado la perspicaz Delegada del Gobierno de la Comunidad de Madrid ha expirado, márchense o nos veremos obligados a REPETÍRSELO UNA Y OTRA VEZ HASTA LA SACIEDAD PORQUE NO PODEMOS USAR LA FUERZA”, “Si son tan amables, no nos tiren vallas, ni botellas ni objetos punzantes, que hacen daño”.  Sí, definitivamente habría que verlos…

Creo que la ciudadanía en general no se da cuenta de que los policías tienen que custodiar el Congreso aunque los que estén dentro sean también unos meapilas, zascandiles y mequetrefes, pero esos Diputados lamentablemente “representan” al pueblo, han sido elegidos en unas elecciones democráticas. Si tanto se queja la gente, que no hubieran votado al PPSOE(en estas pasadas elecciones a unos y en las anteriores a los otros) y hubieran optado por otros partidos minoritarios que igual (quién sabe) hubieran llevado la crisis de otra manera.  

Claro que esos mismos policías que tenían que desalojar la plaza por la fuerza están quemados hasta el mismísimo tuétano, hasta ellos también ha llegado la tijera y si dejamos hablar a las estadísticas, creo recordar (corregirme si me equivoco), que en Madrid hay 10 manifestaciones diarias, aguantar esa zaparrada día tras día tiene que ser una putada, si me permitís la vulgaridad.

En la cabeza de muchos de esos señores con uniforme seguramente este la idea siguiente: “qué narices hago yo aquí si estoy de acuerdo con la masa”. Pero su obligación es velar por el orden público y por aquellos que detentan el poder. Mi padre opina y no sin razón, que lo mejor que podían haber hecho los miembros de la UIP es desmontar el chiringuito y dejar que los manifestantes “pacíficos” se hubieran colado en el Congreso a debatir pausadamente y de manera armoniosa sus opiniones políticas, tomando un café y comiendo pastitas…

Entonces los malos malísimos de la película serían los pobres policías de la UIP porque si hacen caso a las órdenes del Gobierno malo, y si hacen caso al pueblo, peor.  

Yo en mi humilde parecer, estoy convencido de que aún es pronto para valorar la gestión de barbicas Rajoy, que recortar hay que recortar y que Roma no se construyó en un día, vamos, que si es correcto lo que el Gobierno esta haciendo aún tardaremos un tiempo en ver si las consecuencias de lo realizado son positivas o… Bienvenido Mister Draghi. Pero igual antes de ajustar el cinturón a la ciudadanía, los peces gordos que nos gobiernan deberían ajustarse el cinturón de Gucci(aceptamos otras marcas de la misma índole) que llevan y quitar a mansalva Diputados, eliminar al inútil Senado, bajarse el sueldo a ellos y a los caciques de muchos Ayuntamientos españoles, etc, etc, etc.   

Después de desahogarme e imitar (supongo que en balde) a un buen redactor de artículos, os pido disculpas por el rollazo y os mando un saludo muy fuerte.

Bu
Ou
Eu